Los límites del acuer=
do
de mediación
The
limits of the mediation agreement
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1 |
Nube Catalina Calle Masache |
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https://orcid.org/0009-0000-2333-7034 |
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Universidad Católi=
ca
de Cuenca (UCACUE), Cuenca, Ecuador |
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2 |
José Guadalupe Ste=
ele
Garza |
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https://orcid.org/0000-0002-0439-230X |
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Universidad Autóno=
ma
de Nueva León (UANL), Nueva León, México |
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Artículo de Investigación
Científica y Tecnológica Enviado: 15/01/2025 Revisado: 19/02/2025 Aceptado: 17/03/2025 Publicado:20/06/2025 |
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Cítese: |
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Calle Masache, N. C., & Steele Garza, J. G. (2025). L=
os
límites del acuerdo de mediación. AlfaPublicacion=
es,
7(2), 129–154. ht=
tps://doi.org/10.33262/ap.v7i2.616
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ALFA PUBLICACIONES, es una revista multidisciplinar, trimestral, que se publicar=
á en
soporte electrónico tiene como misión contribuir a la
formación de profesionales competentes con visión humanística y crítica q=
ue
sean capaces de exponer sus resultados investigativos y científicos en la
misma medida que se promueva mediante su intervención cambios positivos e=
n la
sociedad. https://alfapublicaciones.co=
m
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Esta revista está
protegida bajo una licencia Creative Commons =
Attribution Non Commercial No
Derivatives 4.0 International. Copia de la licencia: http://creativecommons.org/l=
icenses/by-nc-sa/4.0/ |
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Palabras
claves: Mediación, conflictos, acuerdo, límites y
efectividad |
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Introducción.
La mediación es un método de solució=
n de
conflictos que permite a los involucrados alcanzar acuerdos de manera
voluntaria, confidencial y flexible. Objetivo. El objetivo de este est=
udio
es analizar los límites del acuerdo de mediación, a fin de comprender sus
alcances y restricciones en el marco legal y práctico. Metodología. Se empleó un enfoque cualitativo, basado en la
revisión de literatura especializada, así como normativa jurídica y casos
relevantes en los que se han identificado las restricciones a los acuerdo=
s. Resultados. Los hallazgos de e=
ste estudio
indican que los límites del acuerdo pueden clasificarse en las siguientes
categorías principales: Vulnerabilidad, ley, moral y buenas costumbres. Conclusión. El estudio revela =
que,
si bien es cierto la mediación es una herramienta valiosa en la resolució=
n de
controversias, sus acuerdos están sujetos a diversos límites los cuales s=
e deben
tener presentes a fin de no afectar su efectividad. Área de estudio general. Derecho. Área de estudio específico. Métodos alternos de solución de
conflictos. Tipo de estudio. Artículo original. |
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Keywords:Mediation, conflicts, agreement, limits, effectiveness |
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Abstract |
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1. Introducción
=
La
mediación, como un método para resolver disputas, se ha constituido en una
herramienta útil en diversos ámbitos tanto legales y sociales por las venta=
jas
que ofrece, a criterio de
Para el desarrollo de este estudio, se realizó un
estudio comparativo de la normativa en diferentes jurisdicciones para
identificar similitudes y diferencias en la regulación de los acuerdos de
mediación, también se realizaron estudios de casos concretos con el fin de
comprender los factores que influyen en su efectividad. Se aplicó un anális=
is
documental de sentencias judiciales relacionados con la mediación, lo que
permitió observar tendencias en la interpretación y aplicación de estos
acuerdos. Finalmente se utilizó una aproximación interdisciplinaria, integr=
ando
conocimientos del derecho y la sociología para obtener una visión más compl=
eta
de los límites de la mediación y sus implicaciones en la resolución de
conflictos.
3.
Discusión
La mediación es un método de resolución de conflic=
tos,
en el cual un tercero neutral llamado mediador facilita el diálogo para que
sean las partes mismas las que encuentren la solución a sus controversias, =
tal
como lo sostienen Gorjón & Steele (2025): “es un mét=
odo
de solución de conflictos en el que las partes son guiadas por un tercero p=
ara
llegar a una solución” (p. 19). La mediación se utiliza en una amplia varie=
dad
de contextos como por ejemplo conflictos familiares, laborales, disputas
vecinales, civiles. Este enfoque colaborativo busca empoderar a las partes =
para
que satisfagan sus necesidades y preocupaciones por sí mismos con la ayuda =
de
un tercero; dicha solución se concreta en un acta.
El
acta de mediación es un escrito que realiza el mediador una vez que la
mediación haya finalizado con acuerdos totales o parciales. En ella se plas=
man
los términos de dichos acuerdos, debe ser suscrita por las partes y el medi=
ador
de un Centro Autorizado de la Función Judicial y a partir de ese momento, t=
iene
el mismo valor jurídico que una sentencia. (Agnelli=
& Matos,=
2020,
p. 107)
La terminación del proceso de mediación se da con =
la
suscripción del acta de acuerdo total o parcial o sin que se haya llegado al
mismo; el acta se constituye en ley para los intervinientes ya que se trata=
de
un documento final que establece los términos y condiciones bajo los cuales=
las
partes solucionan sus disputas, “la primera afirmación que se puede hacer es
que, en general, los acuerdos de mediación (incluidos los de naturaleza civ=
il y
familiar) proceden jurídicamente siempre que se trate de materia disponible=
” (Sánchez & García, 2018, p. 205).
En el caso del estado de Nuevo León-México la
mediación puede ser llevada a cabo por facilitadores públicos o privados y =
la Ley
de Mecanismos Alternativos para la Solución de Controversias para el Estado=
de
Nuevo León en su artículo 37 (Secretaría General de Gobierno del
Estado de Nuevo León, 2017), establece:
Los
facilitadores en mecanismos alternativos tendrán, en el ejercicio de sus
atribuciones y con independencia a las reglas internas o legales del Instit=
uto
o de los Centros de Mecanismos Alternativos públicos o privados en el que se
desempeñen, los siguientes derechos y obligaciones:
I.
Desarrollar el mecanismo alternativo elegido de conformidad con lo señalado=
en
la presente Ley y demás disposiciones aplicables, lo que comprenderá, en su
caso, lo dispuesto en cláusulas compromisorias o acuerdos de mecanismos
alternativos;
II.
Cerciorarse del correcto entendimiento y comprensión que los participantes
tengan del desarrollo del mecanismo alternativo elegido, desde su inicio ha=
sta
su conclusión, así como de sus alcances;
III.
Exhortar a los participantes a cooperar ampliamente y con disponibilidad pa=
ra
la solución de la controversia;
IV.
Mantener la confidencialidad en los términos de la presente Ley;
V.
Declarar la improcedencia del mecanismo alternativo elegido en los casos en=
que
así corresponda;
VI.
Excusarse de conocer del mecanismo alternativo elegido cuando se encuentre =
en
alguna de las condiciones en que la legislación procesal aplicable a la
controversia lo obligue a excusarse;
VII.
Capacitarse en la materia;
VIII.
Rendir al Instituto los informes estadísticos que se les requieran, salvo si
desempeñan sus actividades en un Centro de Mecanismos Alternativos acredita=
do,
en cuyo caso por su conducto se remitirán. En todos los casos deberá respet=
arse
la confidencialidad de los participantes y los pormenores de cada asunto
atendido, salvo lo dispuesto en el artículo 5 fracción I de la presente Ley=
; y,
IX.
Los demás que se deriven de las disposiciones legales aplicables.
Entonces, el artículo detalla los derechos y
obligaciones de los facilitadores en mecanismos alternativos de solución de
conflictos, ello encaminado a asegurar que los involucrados comprendan el
proceso y exhortarlos a cooperar; dichas obligaciones están comprendidas en=
la
ley vigente de la materia con miras en lo posible a lograr un acuerdo.
En tanto que en Ecuador la Ley de Arbitraje y
Mediación en su artículo 48 (Congreso Nacional del Ecuador, 2006), disp=
one
que:
La
mediación prevista en esta Ley podrá llevarse a cabo válidamente ante un
mediador de un centro o un mediador independiente debidamente autorizado. P=
ara
estar habilitado para actuar como mediador independiente o de un centro, en=
los
casos previstos en esta Ley, deberá contarse con la autorización escrita de=
un
centro de mediación. Esta autorización se fundamentará en los cursos académ=
icos
o pasantías que haya recibido el aspirante a mediador. El centro de mediaci=
ón o
el mediador independiente tendrá la facultad para expedir copias auténticas=
del
acta de mediación.
La normativa pone de manifiesto la necesidad de qu=
e el
mediador cuente con la autorización de algún centro de mediación para legit=
imar
su actuación en los procesos, así como también formación académica o pasant=
ías;
tanto el Centro de mediación como el mediador independiente, debidamente
autorizado, tienen la aptitud para expedir actas auténticas del acuerdo. (Rodríguez & Arroba, 2023)
El acuerdo de mediación es un documento legalmente
vinculante que sirve como un registro tangible de la resolución consensuada
alcanzada durante el proceso. “Por lo dicho, el acta de mediación se consti=
tuye
en la máxima expresión escrita de todo o que ha ocurrido en el procedimient=
o” (Steele & Calle, 2023, p. 81). El acta de mediación sup=
le
así a la sentencia emitida por un juez en un procedimiento judicial, de ahí=
que
su cumplimiento es esencial para mantener la integridad del procedimiento y
asegurar que las partes involucradas se adhieran a los términos acordados, =
al
respecto la Corte Suprema de Justicia de Ecuador, Oficina de Mediación afir=
ma
que “No somos muchas veces lo suficientemente conscientes de la importancia=
del
acuerdo en nuestras vidas y del papel trascendental que tiene para que oper=
e la
armonía y la concordia en nuestra sociedad” (Corte Suprema de Justicia de
Paraguay, 2007, p. 106). Es así, que tanto acuerdo como concordia provienen=
de
la raíz latina cor, de la que nace la pa=
labra
en latín corde que significa cora=
zón,
debiendo los corazones de los seres humanos permanecer unidos, fomentando la
paz
Es por ello por lo que el acuerdo es un compromiso
entre dos o más partes sobre un asunto específico y en el contexto legal, un
acuerdo puede tener implicaciones vinculantes para las partes en el cual se
regulan derechos y obligaciones. El desarrollo de la mediación se va convir=
tiendo
en un recurso común para resolver disputas, así en la provincia del
Azuay-Ecuador, conforme a sus estadísticas mostradas en la tabla 1=
se alcanzaron un total de 851 acuerdos.
Número
de acuerdos totales y parciales en Azuay en el año 2023
|
Tipo de Acuerdo |
Número de Acuerdos |
|
Acuerdo Parcial |
2 |
|
Acuerdo Total |
849 |
|
Total=
de Acuerdos |
851 |
Fuente: C=
onsejo
de la Judicatura-Planta Central.
Nota: En la provincia del Azuay existen centros de
mediación en las ciudades de Cuenca, Gualaceo, Paute y Santa Isabel.
=
3.1.
El acta de mediación
Para la Real Academia Española (RAE, 2025=
),
acta es: “Relación escrita de lo sucedido, tratado o acordado en una junta”=
. Un
acta es un documento escrito que recoge de manera precisa y objetiva detall=
ada
los eventos, las decisiones que han tenido lugar en un momento específico. =
Ahora bien, en materia de mediación, se trata de un
documento escrito que refleja los acuerdos mutuos alcanzados durante las
sesiones de mediación, es un registro que acoge los términos y condiciones a
los que han llegado las partes involucradas con la ayuda del mediador en ba=
se a
reflexiones imparciales, recalcando que es resultado de la aspiración de las
partes involucradas más no del mediador. (Rodrígu=
ez
& Jaramillo, 2023)
Si
el facilitador detecta que la mediación no puede lograr el objetivo que se
busca o es inadecuada al caso, atendiendo a sus propias limitaciones, debe
reconocerlos y recomendar se radique la causa en un tribunal o se busque a =
un
tercero que decida sobre la legitimidad de las pretensiones y los reclamos.=
(Corte Suprema de Justicia de Paraguay, 2007, p. 74)
Al actuar de esta manera el mediador contribuye a =
la
satisfacción de las partes, lo cual recaerá en un acuerdo eficaz que será
acatado. En estos casos cualesquiera de ellas puede acudir con su reclamaci=
ón
al órgano judicial competente de conformidad al artículo 46 literal a) de l=
a Ley
de Arbitraje y Mediación (Congreso Nacional del Ecuador, 20=
06):
Cuando
exista convenio escrito entre las partes para someter sus conflictos a
mediación. Los jueces ordinarios no podrán conocer demandas que versen sobr=
e el
conflicto materia del convenio, a menos que exista acta de imposibilidad de
acuerdo o renuncia escrita de las partes al convenio de mediación. En estos
casos cualesquiera de ellas puede acudir con su reclamación al órgano judic=
ial
competente.
Ello se refiere, a la aplicación de la mediación c=
omo
un mecanismo alternativo de solución de conflictos y establece condiciones =
bajo
las cuales un tribunal ordinario puede intervenir en un conflicto que ha si=
do
sometido previamente a mediación, es decir, mientras el convenio de mediaci=
ón
esté en vigor, los jueces ordinarios no tienen autoridad para aceptar y
procesar demandas relacionadas con el conflicto descrito en dicho acuerdo; =
los
jueces podrán intervenir si existe un acta que documente la imposibilidad de
alcanzar un acuerdo a través de la mediación o si las partes han renunciado=
por
escrito al convenio. En los casos indicados, cualquiera de los involucrados
tiene derecho de llevar su reclamo al tribunal ordinario que tenga la
jurisdicción adecuada para resolver el conflicto o demandar su ejecución, d=
ado
que tiene un valor legal que proporciona un registro claro y objetivo de lo
discutido y acordado durante el proceso, debido a que el acuerdo de mediaci=
ón
celebrado con las formalidades establecidas en la Ley tiene el efecto de
sentencia ejecutoriada y cosa juzgada, tal como lo dispone el artículo 363
numeral 3 del Código Orgánico General de Procesos (COGEP) (Asamblea Nacional del Ecuador, 2015), y que se analizará
posteriori.
=
3.2.
Solemnidades del acta de mediación par=
a su
eficaz cumplimiento
De entrada, indicaremos que las solemnidades del a=
cta
de mediación hacen alusión a los requisitos formales que deben cumplirse pa=
ra
que ésta sea válida y tenga plenos efectos legales. Estos requisitos asegur=
an
la autenticidad y la credibilidad del documento, así como la garantía de que
refleje de manera precisa los acuerdos alcanzados.
Se incluyen entre algunas de estas solemnidades la
identificación clara de los intervinientes, la fecha, hora y lugar de la se=
sión
de la mediación, una descripción detallada de los temas tratados y acuerdos
alcanzados, así como las firmas de todas las partes y del mediador, las cua=
les
ya fueron mencionadas previamente.
Se puede decir que éstas, constituyen solemnidades
generales que todo acuerdo de mediación requiere, pero, por otro lado, exis=
ten
solemnidades específicas que vienen a constituir requisitos formales
adicionales que son necesarios dependiendo de la naturaleza del acuerdo; es=
tas
solemnidades específicas pueden variar según las leyes aplicables, la
jurisdicción o las necesidades particulares de las partes. Así por ejemplo =
si
se trata de un acuerdo de mediación que haga referencia a la transferencia =
de
un bien inmueble éste, tiene que ser elevado a escritura pública e inscrito=
en
el Registro de la Propiedad, al respecto el artículo 1838 del Código Civ=
il (Congreso Nacional del Ecuador, 2005), dispone:
El
cambio se reputa perfecto por el mero consentimiento; excepto que una de las
cosas que se cambian o ambas sean bienes raíces o derechos de sucesión
hereditaria, en cuyo caso, para la perfección del contrato, será necesaria
escritura pública.
Aunque el acuerdo de mediación es un documento en =
el
que las partes involucradas en el conflicto expresan su voluntad de resolve=
rlo
mediante la mediación, en este acuerdo, los mediados se comprometen a
participar de una manera activa y de buena fe en la búsqueda de una solución
con la ayuda de un tercero imparcial llamado mediador. La escritura pública=
es
un documento formal otorgado ante un escribano que certifica la voluntad de=
las
partes respecto a un acto o contrato determinado. La escritura pública es i=
ndispensable
en ciertos tipos de contratos como aquellos que involucran bienes inmuebles,
sucesión hereditaria, servidumbres entre otros.
Quiere decir que para que se perfeccione el acuerd=
o de
mediación en el caso que nos ocupa, es necesario formalizar el acuerdo medi=
ante
un documento notarial redactado ante un notario público. Esta formalidad
garantiza la autenticidad y la seguridad jurídica del acuerdo, ya que otorg=
a fe
pública y tiene valor probatorio ante terceros.
En consecuencia, tanto las solemnidades generales =
como
las solemnidades específicas son requisitos necesarios que tienen que ser
cumplidos. Insistimos en que ambos tipos de solemnidades son importantes pa=
ra
garantizar la validez y efectividad del acuerdo de mediación.
=
3.3.
Límites del acuerdo de mediación
Aunque la mediación ofrece un espacio flexible y
colaborativo para encontrar soluciones, existen ciertos límites que deben s=
er
considerados y respetados para garantizar la equidad, la legalidad y la
efectividad del acuerdo alcanzado. Así pues, en concordancia con lo preveni=
do
en el artículo 190 de la Constitución ecuatoriana, el artículo 43 de la =
Ley
de Arbitraje y Mediación (Congreso Nacional del Ecuador, 20=
06),
dispone:
La
mediación es un procedimiento de solución de conflictos por el cual las par=
tes,
asistidas por un tercero neutral llamado mediador, procuran un acuerdo
voluntario, que verse sobre materia transigible, de carácter extrajudicial y
definitivo, que ponga fin al conflicto.
Acorde con la premisa de que está permitido todo lo
que no está prohibido, se puede llevar a
mediación todos aquellos conflictos que no estén prohibidos por la l=
ey
mediante una norma específica, este principio de legalidad es esencial para
garantizar un sistema justo que requiere de una legislación clara y precisa
para evitar interpretaciones ambiguas que atenten contra la seguridad juríd=
ica
y aunque, como se ha evidenciado, el proceso de mediación es una herramienta
valiosa para la resolución de conflictos sin embargo existen límites asocia=
dos
a este proceso que se deben tener en consideración.
Ahora bien, al ser los acuerdos de mediación
declaraciones de voluntad éstos deben versar sobre un objeto, para Claro (1986) “el objeto es también un requisito necesario =
para
la existencia del acto jurídico destinado a producir obligación” (p. 13).
No
sólo las cosas que existen pueden ser objeto de una declaración de voluntad,
¡sino las que se espera que existan; pero es menester que las unas y l=
as
otras sean comerciables, y que estén determinadas, a lo menos en cuanto a su
género.
Debe tratarse de una cosa en sentido propio, que t=
enga
una existencia real o posible por lo que puede consistir en una cosa presen=
te o
futura o en un hecho, que no se encuentre prohibida por la ley, es decir, q=
ue
se trate de un objeto lícito que no vaya en contra de la ley, la moral o las
buenas costumbres y deben ser cosas determinadas o cuando menos
determinables, lo cual resulta indispensable a lo
menos en cuanto al género y a la cantidad. Por lo expuesto, debe entenderse
como el objeto del acuerdo de mediación las acciones específicas o la
abstención de realizarlas en que han convenido los mediados.
=
3.4.
La autonomía de la voluntad de las partes en la mediación
Uno de los pilares fundamentales del proceso de
mediación es la autonomía de la voluntad el cual se manifiesta en la aptitu=
d de
los mediados para definir los términos del acuerdo de manera consensuada,
basándose en principios, intereses, necesidades y valores. Así pues, la
autonomía de la voluntad, en el ámbito legal y ético, reconoce y respeta la
capacidad de las personas para tomar decisiones y ejercer su libre albedrío=
.
Para
Kant la autonomía no solo era un principio supremo, sino que iba más allá
otorgaba al principio la legitimidad de todas las leyes morales y de los
deberes, es decir que el hombre no solo está sujeto a las leyes de los homb=
res,
sino que en primera medida está atado a su propia legislación que es según =
Kant
“universal” (Ángel, 2016, p. 74)
Esta afirmación del autor destaca la importancia d=
e la
autonomía de la voluntad, no solo como un principio ético supremo, sino tam=
bién
como el fundamento que legitima otras normas morales y deberes éticos en una
estructura más amplia.
Al respecto la Corte
Constitucional del Ecuador (2021b), ha resuelto en el dictamen
5-21-TI/21, de 30 de junio de 2021 indicando en el párrafo 33 que “es
importante reiterar el carácter voluntario u origen convencional de los mét=
odos
alternos de solución de conflictos”, y en el párrafo 34 indica “al carácter
eminentemente convencional de los métodos alternos de solución de conflicto=
s,
que, por regla general, exigen un acuerdo de voluntades o consentimiento pa=
ra
someterse a estos métodos y que los Centros no realizan procedimientos de
conciliación y arbitraje por sí mismos”.
Lo dicho, como no podía ser de otra manera, se apl=
ica
también al ámbito de la mediación ya que se trata de una máxima fundamental=
que
se refiere al principio de que las partes involucradas en el problema tiene=
n el
poder y la libertad de tomar decisiones sobre cómo resolver sus disputas
siempre que como ya se ha visto no contraríe la ley, la moral y el orden
público, en este contexto Peña (2019) indica que=
:
Constituye
un esfuerzo estructurado para facilitar la comunicación entre los contrario=
s,
en lo que las partes pueden voluntariamente evitar el sometimiento a un lar=
go
proceso judicial con el desgaste económico y emocional que este conlleva
pudiendo acordar una solución para su problema en forma rápida, económica y
cordial. (p. 47)
En conclusión, este principio permite a las partes=
ser
los principales arquitectos de la solución a su conflicto promoviendo su
sentido de responsabilidad durante el proceso.
=
3.5.
La Ley
Antes de nada, se debe mencionar que la ley como
fuente del derecho, se refiere al conjunto de normas jurídicas establecidas=
por
el Estado que tienen el objetivo de regular las relaciones entre los
individuos, instituciones y entidades dentro de una sociedad, ya lo decía Rousseau (1999) en su obra Contrato Social “cuando digo qu=
e el
objeto de las leyes es siempre general, entiendo que aquéllas consideran los
ciudadanos en cuerpo y las acciones en abstracto; jamás el hombre como a
individuo ni la acción en particular” (p. 34).
El autor pone de manifiesto, la importancia de la
universalidad y la abstracción en la elaboración de las leyes, al considera=
r a
los ciudadanos como un colectivo, así las leyes aseguran justicia,
imparcialidad y equidad dentro de una sociedad, evitando así la arbitraried=
ad y
desigualdad.
El artículo 1 del Código Civil ecuatoriano
define a la ley como “una declaración de la voluntad soberana que, manifest=
ada
en la forma prescrita por la Constitución, manda, prohíbe o permite” (Congreso Nacional del Ecuador, 2005). El indicado artículo
determina la clasificación de las leyes en imperativas, prohibitivas y
permisivas. Entonces, la ley proporciona certeza jurídica al establecer un
marco normativo predecible y uniforme para resolver conflictos y tomar
decisiones legales.
No
se trata de una definición doctrinaria sino práctica, o de valor legislativ=
o,
cuya finalidad es enseñar qué normas deben ser tenidas por leyes. Por no ser
una definición doctrinaria, no se encontrará en ella enumeración de las
características que la ley debe tener, sino que simplemente se señala el
contenido fundamental de la ley: mandatos, prohibiciones o permisiones, y se
señala sus principales características materiales y formales: la ley es una
manifestación externa y constitucional del Derecho. (
De acuerdo con lo indicado, son leyes imperativas
aquellas que establecen reglas obligatorias que tienen que ser cumplidas por
los destinatarios y que no permiten que las partes involucradas acuerden al=
go
diferente, son conocidas como leyes de orden público; son normas prohibitiv=
as
las que como su nombre indica prohíben ejecutar ciertas acciones o conducta=
s,
en ellas se indica lo que no está permitido y, leyes permisivas las que
autorizan a realizar ciertas acciones pero sin que se las impongan de lo qu=
e se
puede decir que son aquellas que permiten a las partes actuar de una manera
específica si así lo desea. Entonces, la ley desempeña un papel fundamental=
al
establecer los límites del acuerdo de mediación, ya que establece los
parámetros dentro de los cuales se puede alcanzar un compromiso, garantizan=
do
así el respeto de los derechos de los comparecientes.
Así la Corte Nacional de Justicia del
Ecuador (2019), en el Oficio 213-2019-P-CPJP mantiene:
El
acta de mediación sobre alimentos es un título de ejecución que se puede
cumplir directamente o a través de la jueza o juez conforme dispone el Art.=
370
del COGEP. Lo resuelto en mediación relativo al derecho de alimentos es
revisable mediante cualquier incidente, siempre en atención al principio de
interés superior del niño, los alimentantes subsidiarios tienen justamente =
esa
naturaleza suplir a uno de los progenitores y es función del juzgador anali=
zar
en cada caso específico la necesidad de participación de los demás alimenta=
ntes
subsidiarios.
La Corte Nacional de Justicia de Ecuador, establece
condiciones o circunstancias en las que respetando la normativa legal vigen=
te
los acuerdos de mediación pueden ser revisados y ejecutados, siempre
considerando el principio del interés superior del niño, ya que pueden surg=
ir
nuevas circunstancias que ameritan que los acuerdos sean examinados siempre=
con
el objetivo de proteger el bienestar del menor, este enfoque garantiza la
flexibilidad y adaptabilidad de los compromisos de alimentos pero en apego =
a lo
permitido en la ley.
=
3.6.
La moral
La moral es entendida como la ciencia del bien, se
refiere a los principios o normas que guían el comportamiento humano desde =
un
punto de vista ético, es considerada la ciencia de lo justo e injusto, la m=
oral
entonces se refiere a principios que regulan el comportamiento del hombre e=
n la
sociedad, si bien es cierto la moral es individual ya que puede diferir de
persona a persona, proporciona un marco ético que establece pautas para
distinguir entre lo correcto e incorrecto, en palabras <=
span
style=3D'color:windowtext;text-decoration:none;text-underline:none'>De Trazegnies Granda (2006):
Ahora
bien, si bien el Derecho no puede imponer el bien porque viola el espacio
propio de los demás hombres, la moral sí puede exigir el bien en la medida =
de
que, a diferencia del Derecho, no se orienta a normar la conducta de los de=
más
sino la de cada uno de nosotros mismos: el Derecho se dirige al cerebro y
pretende llegar a un acuerdo sobre una racionalidad social, entendida como
forma de coexistencia productiva; en cambio, la moral se dirige al corazón =
de
cada uno de nosotros. La moral sí nos exige que nosotros seamos buenos. Y e=
so
significa que debemos analizar nuestras acciones ya no solamente para evitar
causarle un daño a otro, sino que, dando un importante paso más allá, debem=
os
procurar que nuestra conducta tienda a realizar el bien. (p. 409)
Es necesario señalar que la moral puede variar ent=
re
diferentes culturas y comunidades y está sujeta a cambios, pero tiene estre=
cha
relación con las buenas costumbres que se refieren a comportamientos
socialmente aceptados y considerados adecuados en una comunidad en un momen=
to y
lugar específicos.
La
voz de la conciencia moral debe pues ser oída por, sobre todo; sus exigenci=
as y
sus prohibiciones son decisivas en todo caso: ésta es la enseñanza suprema =
que
Sócrates ha legado, con su resolución de no sustraerse al cumplimiento de la
inmerecida e injusta condena. (Mondolf=
o, 1954, p. 15=
)
Aquí se destaca como para Sócrates la conciencia m=
oral
tiene una posición superior que tiene que ser escuchada y respetada sobre
cualquier otra consideración como una guía en nuestras actuaciones, la frase
sugiere que la moral no debe ser comprometida incluso en situaciones advers=
as o
bajo presiones externas.
Al ser la mediación un método alternativo de soluc=
ión
de conflictos que se basa en principios éticos como el respeto mutuo, la
imparcialidad, la confidencialidad, la moral puede influir en los límites d=
el
acuerdo al establecer las condiciones que las partes están dispuestas a ace=
ptar
y las que se consideran inaceptables desde un punto de vista moral.
El modelo de la mediación es un imperativo moral, =
que
se basa en la presunción de rectitud y civismo en el comportamiento de los
ciudadanos, de quienes se espera se guíen por principios internos que orien=
tan
sus acciones. Se aspira a establecer relaciones armoniosas entre las person=
as y
una convivencia armoniosa, donde el potencial radique en los deberes y
responsabilidades que cada individuo siente que debe cumplir, en lugar de
aquellos impuestos por las leyes y regulaciones externas (Musetta, 2012).
Esta perspectiva resalta el enfoque humanista e
idealista de la mediación en la resolución de conflictos en donde la ética =
y la
responsabilidad juegan un papel crucial en una sociedad; sin embargo, tambi=
én
se sugiere que éste modelo depende en gran medida de la madurez moral y el
sentido de compromiso de los ciudadanos, tal como lo señala la Ley de
Mecanismos Alternativos para la Solución de Controversias para el Estado de
Nuevo León, en el artículo 26 numeral V (Secreta=
ría
General de Gobierno del Estado de Nuevo León, 2017), sobre los requisitos que tiene que cump=
lir el
acuerdo de mediación:
V.
Especificar los acuerdos a que hubieren llegado los participantes, debiendo
precisar las obligaciones de dar, hacer o no hacer que hubieren acordado los
participantes, así como el lugar, el modo, la substancia y el tiempo en que
estas deberán cumplirse, las penas convencionales o las modalidades pactada=
s,
en su caso. Las obligaciones de contenido ético o moral podrán constar en e=
ste documento,
más no serán susceptibles de ejecución coactiva.
De esta manera el artículo menciona, que, aunque l=
os
acuerdos pueden contener obligaciones de índole moral o ético, estas no pue=
den
ser ejecutadas de manera coactiva, es decir no pueden ser exigidas legalmen=
te
ante los tribunales. Dichas obligaciones tienen un valor simbólico y depend=
en
como se ha dicho del cumplimiento voluntario de los involucrados, por lo que
este tipo de acuerdos busca reforzar el compromiso personal de los
intervinientes, pero sin la posibilidad de exigirlos por mecanismos legales=
coercitivos.
=
3.7.
El orden público
El orden público es un concepto clave en la regula=
ción
de la vida en sociedad que asegura una serie de principios y normas que
procuran el bienestar social, para =
Llambia=
s (1964)=
se denomina `orden público´ al “conjunto de principios eminentes —religioso=
s,
morales, políticos y económicos— a los cuales se vincula la digna subsisten=
cia
de la organización social establecida” (p. 158). El orden público es esenci=
al
para el funcionamiento adecuado de una sociedad, ya que abarca diversas esf=
eras
y sin estos principios la organización social no podría subsistir de manera
digna y ordenada.
El concepto de orden público se modifica
continuamente, en la medida que evoluciona la sociedad. Es por eso por lo q=
ue
se le entiende como un modelo societario definido por el derecho en un
determinado momento histórico de evolución de sus valores. En otras palabra=
s,
el orden público está compuesto por los principios (no sólo jurídicos, sino
sociales, económicos, morales, entre otros) sobre los cuales se basa la
organización y estructura de la sociedad.
De la noción que antecede, se establece que el tér=
mino
orden público está encaminado a referirse a un conjunto de principios que
buscan preservar la paz, la seguridad y la moral en la sociedad. Estos
principios son esenciales para el buen funcionamiento de una sociedad y var=
ían
de un lugar a otro, pueden evolucionar con el tiempo y adaptarse a los camb=
ios
sociales y culturales. En muchos ordenamientos jurídicos ciertos actos que =
son
contrarios al orden público pueden ser sancionados o ser considerados prohi=
bidos
a fin de garantizar el bienestar general. Al respecto
En el contexto de la mediación y los acuerdos que
surgen de ella, el orden público puede influir en los límites del acuerdo de
varias maneras; así podemos decir, que el acuerdo no puede contravenir dere=
chos
fundamentales de las personas, ni puede ser perjudicial para el bienestar
general de la sociedad y será nula cualquier disposición del acuerdo que vi=
ole
estos derechos. En consecuencia, el orden público actúa como un límite para=
los
acuerdos de mediación al asegurar que éstos respeten los derechos fundament=
ales
y las normas imperativas que son esenciales para el funcionamiento adecuado=
de
la sociedad.
=
3.8.
Otros límites específicos para conside=
rar
en el acuerdo de mediación
En este punto es oportuno referirnos a otra noción
fundamental que debe aplicarse en todo acto o declaración de voluntad, que
interactúan de manera complementaria para garantizar un equilibrio justo en=
las
relaciones, nos referimos al principio de buena fe. Sobre esto la
…que
para evaluar si un sujeto determinado actuó o no de buena fe, resulta
imperativo examinar, en cada una de las precitadas fases, la conducta por é=
l desplegada,
pero de manera integral, o sea en conjunto, dado que es posible que su
comportamiento primigenio, en estrictez, se ciña a los cánones del principio
rector en cita y ulteriormente varíe, en forma apreciable y hasta sorpresiv=
a,
generándose así su inequívoco rompimiento. De allí que la buena fe no se pu=
eda
fragmentar, en orden a circunscribirla tan sólo a un segmento o aparte de u=
na
fase, por vía de ejemplo: la precontractual-o parte de la precontractual-, =
ya
que es necesario, como corresponde, auscultarla in globo, según se indicó,
valorando las diversas oportunidades que los interesados tuvieron para actu=
ar
con lealtad, corrección (correttezza) y diligen=
cia,
según sea el caso (6146).
Lo manifestado por la Corte Suprema de Colombia es
concluyente, debido a que la buena fe es un concepto que abarca la totalida=
d de
la conducta de una persona, la cual no puede ser medida de manera fragmenta=
da,
constituyéndose en un principio fundamental especialmente en las relaciones
contractuales donde la confianza y la honestidad son indispensables para el
cumplimiento de los acuerdos.
Y si la autonomía de la voluntad es un principio q=
ue
otorga a las partes el poder de decidir libremente los términos y condicion=
es
del acuerdo, el principio de buena fe implica que las partes deben actuar de
manera honesta, leal y justa en el proceso de la negociación, este principio
busca evitar abusos, engaños o conductas desleales que pueden perjudicarlos
durante el proceso de mediación. Al respecto Alessan=
dri et
al. (1998) manifiestan que:
Pero
si creemos que la libertad es necesaria para el progreso económico y materi=
al
de los pueblos, también creemos que la libertad absoluta engendra injustici=
as,
crea desigualdades y causa daños. Por eso, es el deber del legislador adopt=
ar
todas las medidas para evitar que los inconvenientes se produzcan y protege=
r a
aquél de los contratantes que se encuentre en manifiesta inferioridad. (p. =
32)
En síntesis, la libertad en la mediación proporcio=
na a
las partes la oportunidad de resolver sus conflictos de manera voluntaria y
flexible pero siempre dentro de los límites legales establecidos.
Así pues, al referirnos a los efectos de las
obligaciones, el artículo 1562 del Código Civil (<=
span
style=3D'color:windowtext;text-decoration:none;text-underline:none'>Congreso
Nacional del Ecuador, 2005), dispone:
Los
contratos deben ejecutarse de buena fe, y por consiguiente obligan, no sólo=
a
lo que en ellos se expresa, sino a todas las cosas que emanan precisamente =
de
la naturaleza de la obligación, o que, por la ley o la costumbre, pertenece=
n a
ella.
De ello, se colige que la buena fe establece límit=
es
éticos para garantizar esa libertad al momento de obligarse jurídicamente, =
para
que esa libertad se ejerza con rectitud y equidad. Boetsch (2015) sostiene: “la buena fe contractual =
se
refiere a que cada una de las partes se entrega confiadamente a la leal
conducta de la otra en el cumplimiento de sus obligaciones, asumiendo que é=
sta
no le engañará” (p. 109).
En estas circunstancias, la voluntariedad y la
autodeterminación de las partes constituyen el fundamento para la validez d=
el
acuerdo de mediación, ello implica que bajo ningún concepto el pacto alcanz=
ado
debe ser impuesto. Esta regla está estrechamente relacionada con la idea de=
que
las soluciones son más efectivas cuando son acordadas voluntariamente por l=
as
partes que han actuado de una manera libre y con capacidad legal.
Otro aspecto importante para tratar es el retorno =
del
poder a los protagonistas, el cual se refiere a la idea de empoderar a las
partes involucradas en un conflicto para que tomen un papel más activo en la
resolución de sus problemas, dado que existen límites para llegar al acuerd=
o de
mediación cuando una de las partes no muestra el interés suficiente de
participar en el proceso. Recordem=
os en
este punto que el mediador actúa como un facilitador imparcial pero las
decisiones finales, plasmadas en el acta, siempre serán tomadas por los
mediados. Gorjón & Vera (2021) al respecto
manifiesta:
Ya
que la sociedad tiene que empezar a visualizar el perfil del mediador como =
un
profesional ético que apoya en la búsqueda de soluciones pacíficas entre los
mediados por medio del proceso de la comunicación efectiva, el mediador debe
ser congruente con su participación y en su discurso como también el
desarrollar habilidades para detectar incongruencias en las partes
participantes. (p. 123)
En síntesis, se resalta la importancia de la neces=
idad
de que los mediadores sean vistos como profesionales éticos, competentes y =
con
habilidades para detectar y manejar los inconvenientes que se presenten dur=
ante
el proceso. Ello fortalece las posibilidades de alcanzar soluciones durader=
as.
Otro límite al acuerdo de mediación es el actuar en
base al error, El Tr=
ibunal
Supremo de España (2013), Sala Civil ha dicho que :
El
error, como vicio de la voluntad que da lugar a la formación de esta sobre =
la
base de una creencia inexacta y que precisa ser esencial (determinante de la
voluntad declarada) e inexcusable... como así lo define la sentencia de 21 =
mayo
2007. Así, para que el error sea relevante para causar la invalidez (rectius, anulabilidad) del contrato son precisos los =
dos
requisitos que enumera la sentencia mencionada y que se reitera en otras
muchas, como las anteriores de 28 septiembre 1996, 21 mayo 1997, 30 septiem=
bre
1999: la esencialidad y la inexcusabilidad. El =
error
esencial implica una creencia inexacta que recae sobre un elemento fundamen=
tal
del contrato. Y el error inexcusable significa que no pudo ser evitado
empleando una diligencia media (STS 603/2013).
En definitiva, no cualquier error puede llevar a la
nulidad de un contrato, solo el error esencial es capaz de viciar el
consentimiento. La jurisprudencia proporciona una base sólida para evaluar =
la
relevancia del error, asegurando los estrictos requisitos que tienen que
cumplirse a fin de impugnar la validez de un negocio jurídico.
Así mismo, encontramos límites al acuerdo de media=
ción
en los casos en los que exista hostilidad, violencia o abuso, como cuando u=
na
de las partes ejerce presión indebida sobre la otra incluso para obligarla a
aceptar el acuerdo mediante amenazas, mediante uso de la fuerza, sea esta
física o moral; por medio de intimidación que se refiere al temor a un mal,=
una
amenaza en contra de cónyuge, ascendientes, descendientes en estas
circunstancias es fundamental tomar en consideración la edad de la víctima =
y la
condición de la persona; ahora bien, el temor reverencial no vicia el
consentimiento.
En
todo contrato, incluso en los solemnes o reales, el consentimiento vaya sol=
o o
acompañado de otro elemento, debe siempre: 1 existir, y 2, reunir ciertas
cualidades de inteligencia y de libertad, en ausencia de las cuales se le
considera viciado. Si el consentimiento está absolutamente destruido por una
causa cualquiera, ninguna existencia tiene el contrato; nada se ha hecho, lo
que existe no es sino una vana apariencia, un mero hecho: el acto jurídico =
es
inexistente. Si el consentimiento se ha dado realmente, pero bajo la influe=
ncia
de una causa que lo priva de su libertad, está viciado; el acto jurídico
existe; pero es anulable. (Planiol=
& Ripert=
, 2000,=
p.
839)
Otro de los límites del acuerdo de mediación se
presenta cuando hay un desequilibrio significativo de poder entre los
intervinientes, el cual ocurre cuando los involucrados no se sienten en
igualdad de condiciones para negociar. Constituyen también muestras de
desequilibrio de poder cuando una de las partes padece por ejemplo problema=
s de
alcoholismo, drogadicción o porque no, sufre de algún trastorno mental que =
le
priva del uso de la razón lo cual impide darse cuenta del alcance de los
compromisos que está adquiriendo y que posteriormente no será capaz de asum=
ir.
De ahí que es importante equilibrar el poder entre las partes a través de la
comunicación abierta y la búsqueda de intereses comunes a fin de proporcion=
ar
un ambiente con mayor paridad evitando que la voluntad no esté libre para
actuar, por ello resulta necesario que las partes tengan un nivel equitativ=
o de
poder, de información y recursos para tomar decisiones de manera justa a fi=
n de
evitar que se vean obligadas aceptar términos desfavorables.
Existen también límites al acuerdo de mediación en=
los
que no es posible mediar y que están fijados en el artículo 663 del Códi=
go
Orgánico Integral Penal (COIP) (Asamblea Nacional del Ecuador, 20=
14):
La
conciliación podrá presentarse hasta antes de la conclusión de la etapa de
instrucción fiscal en los siguientes casos: 1. Delitos sancionados con pena
máxima privativa de libertad de hasta cinco años. 2. Delitos de tránsito qu=
e no
tengan resultado de muerte. 3. Delitos contra la propiedad cuyo monto no ex=
ceda
de treinta salarios básicos unificados del trabajador en general. Se excluy=
e de
este procedimiento las infracciones contra la eficiente administración públ=
ica
o que afecten a los intereses del Estado, delitos contra la inviolabilidad =
de
la vida, integridad y libertad personal con resultado de muerte, delitos co=
ntra
la integridad sexual y reproductiva y delitos de violencia contra la mujer o
miembros del núcleo familiar.
En estas circunstancias, cuando existe violencia
intrafamiliar acudir a un proceso de mediación no sería lo más adecuado deb=
ido
a la dificultad de asegurar que ambas partes estén en igualdad de condicion=
es,
los casos de violencia familiar son una muestra más de desequilibrio de pod=
er
en donde uno tiene un control coercitivo sobre el otro y al ser la mediació=
n un
proceso de resolución de conflictos
requiere de una participación activa y voluntaria de los involucrado=
s en
donde no exista el miedo. Cuando existe violencia intrafamiliar la parte que
ejerce la violencia puede intentar manipular el proceso a fin de mantener el
control a fin de lograr acuerdos que no reflejen las necesidades de la víct=
ima,
ante este tipo de situaciones resulta fundamental priorizar la seguridad y =
el
bienestar de las víctimas mediante otras vías legales y de apoyo.
La prohibición de la mediación en los casos de
violencia intrafamiliar del Ecuador no es distinta al caso de Nuevo
León-México, así tenemos que, en la Ley de Mecanismos Alternativos para =
la
Solución de Controversias (Secretaría General de Gobierno del
Estado de Nuevo León , 2017), de este
estado en el artículo 5 dispone:
Es
la obligación del facilitador para abstenerse de emitir juicios u opiniones=
que
puedan influir en las conclusiones a que arriben las partes, con excepción =
del
procedimiento de conciliación y de aquellos casos en los que éste advierta =
la
existencia de posibles hechos delictivos o de violencia familiar, en cuyo c=
aso
deberá dar por terminado el procedimiento correspondiente, tomando las medi=
das
que sean necesarias para proteger la integridad física y emocional de los
participantes.
Entonces, la mediación no es apropiada para resolv=
er
este tipo de conflictos ya que puede requerir más bien de la intervención de
las autoridades judiciales o de otras instancias especializadas ya que se t=
rata
de temas que afectan al interés público; en los casos de violencia
intrafamiliar los mediadores no están autorizados para tomar las decisiones
legales pertinentes y resulta adecuado recurrir a otros mecanismos legales.=
El
artículo 82 de la Constitución de la República del Ecuador, establece
que el derecho a la seguridad jurídica “se fundamenta en el respeto a la
Constitución y en la existencia de normas jurídicas previas, claras, públic=
as y
aplicadas por las autoridades competentes” (Asamblea
Nacional Constituyente del Ecuador, 2008). En este sentido, la
seguridad jurídica, como elemento esencial de eficacia del ordenamiento
jurídico, garantiza la certidumbre del derecho y la interdicción de la
arbitrariedad. 44. Siguiendo con este criterio, la Corte ha señalado que: (=
…)
el administrado debe contar con reglas claras, estables y coherentes que le
permitan tener una noción razonable del marco jurídico en que se desarrolla=
su
accionar. De igual manera, las autoridades públicas están obligadas a respe=
tar
el ámbito de sus competencias apartando de su accionar cualquier intención =
de
abuso que vaya en detrimento de los derechos de los administrados. Por ende=
, es
obligación de este Órgano Constitucional verificar que las autoridades
jurisdiccionales, en sus decisiones, hayan respetado el marco de sus
competencias y el ordenamiento jurídico previamente establecido (1067-15-EP=
/21)
(Corte Constitucional del Ecuador, 2021a).
Finalmente, el artículo destaca la importancia de =
la
seguridad jurídica que no solo protege los derechos de los ciudadanos al
proporcionar un entorno legal claro, sino que también limita el poder de las
autoridades, promoviendo un sistema justo y equitativo que mantiene la
confianza de los ciudadanos al asegurar un funcionamiento ordenado en la
sociedad.
=
3.9.
Sanciones al mediador por rebasar su
ámbito de actuación
Como una medida crucial para mantener la integrida=
d y
credibilidad en el proceso de mediación, se han establecido sanciones al
mediador cuya participación podría verse menoscabada por circunstancias que
comprometan su neutralidad, excedan sus competencias o violen principios ét=
icos
y legales de la mediación. La
preocupación por sancionar los posibles comportamientos inadecuados, se
evidencian tanto en la legislación nacional como extranjera.
Así el Capítulo VI del Reglamento General del
Centro de Arbitraje y Conciliación de la Cámara de Comercio de Bogotá (=
Ministerio de Justicia y del Derecho de Colombia, 2023), en
los artículos 1.26 al 1.32 establecen un riguroso marco disciplinario para =
los
profesionales de la mediación y resolución de conflictos, definiendo faltas=
y
sanciones basadas en la gravedad de las infracciones. Las faltas incluyen d=
esde
no aceptar designaciones sin justificación válida hasta manipular informaci=
ón
para obtener beneficios, con sanciones que van desde amonestaciones privadas
hasta la exclusión definitiva de las listas del Centro. El procedimiento
disciplinario asegura el derecho a una defensa justa, permitiendo al
investigado presentar pruebas y apelar decisiones. Además, se destacan
infracciones específicas para amonestaciones, suspensiones y exclusiones,
enfatizando la importancia de la ética profesional y la confidencialidad.
Finalmente, el Centro y sus empleados están exonerados de responsabilidad c=
ivil
por conductas de los profesionales, salvo en casos de culpa grave o dolo,
asegurando así la integridad y el cumplimiento de normas en el proceso de
mediación.
Como señala la norma, existe un sistema disciplina=
rio
que garantiza el debido proceso, al cual deben sujetarse los mediadores en =
caso
de incurrir en faltas previamente establecidas, las cuales están penadas de
manera graduada, iniciando con amonestaciones privadas y pudiendo concluir =
con
la expulsión definitiva del centro. Un
punto para resaltar es el que hace énfasis en la ética y confidencialidad e=
n el
ejercicio de la mediación.
En la misma línea el Reglamento General del Cen=
tro
de Arbitraje y Conciliación de la Cámara de Comercio de Guayaquil (Directorio de la Cámara de Comercio de Guayaquil, 1999), e=
n su
Artículo 38 indica las circunstancias bajo las cuales los conciliadores pue=
den
ser excluidos de la lista oficial del Centro, asegurando que solo aquellos =
que
cumplen con altos estándares profesionales y éticos continúen ejerciendo. L=
os
motivos de exclusión incluyen el incumplimiento de los requisitos y
procedimientos legales y reglamentarios, la negativa repetida a aceptar
designaciones o asistir a audiencias sin justificación válida, y la falta de
participación en actividades académicas y de promoción del Centro. También =
se
contemplan sanciones más graves, como la exclusión por violaciones del
principio de confidencialidad y por sanciones penales o disciplinarias. Este
artículo resalta la importancia de la responsabilidad y la profesionalidad =
en la
práctica de la conciliación, protegiendo la integridad del proceso y asegur=
ando
que los conciliadores mantengan el compromiso con las normas y la ética
profesional.
El artículo subraya la importancia de la adherenci=
a a
normas estrictas y la participación activa de los conciliadores (mediadores=
),
asegurando que solo aquellos que demuestren un compromiso constante de étic=
a y
profesionalismo permanecerán en la lista oficial del Centro. Al establecer
consecuencias claras por el incumplimiento de sus deberes, se protege la
confianza de las partes en el proceso y se garantiza que los acuerdos sean
justos y respeten los principios fundamentales de la mediación.
Para concluir, en esa misma línea de ideas, el = Código Orgánico Integral Penal (COIP) de Ecuador en su artículo 179 dispone: “= La persona que, teniendo conocimiento por razón de su estado u oficio, empleo, profesión o arte, de un secreto cuya divulgación pueda causar daño a otra persona y lo revele, será sancionada con pena privativa de libertad de seis meses a un año” (Asamblea Nacional del Ecuador, 2014).<= o:p>
4.
Conclusiones
·&nb=
sp;
La mediación es una
herramienta fundamental en la resolución de conflictos, ofreciendo a los
involucrados la posibilidad de solucionar sus dificultades de una manera
pacífica y beneficiosa para ambos, aplicando la fórmula “ganar-ganar”. Sin
embargo, la autonomía de la voluntad en la mediación no es ilimitada, puesto
que, existen límites en el acuerdo de mediación que son necesarios conocer =
ya
que aseguran que lo convenido sea justo, equitativo y conforme a la ley,
garantizando la protección de los derechos de las partes interesadas.
·&nb=
sp;
Dentro de los límites=
del
acuerdo de mediación, se mencionó al orden público que hace referencia a la
justicia, la libertad e igualdad, y en donde el convenio que atenta contra =
el
orden público puede ocasionar perjuicio a la comunidad. También se hizo
hincapié en que aquello que transgrede los principios éticos, puede causar =
daño
a los involucrados y a la sociedad en general, en donde valores como la lea=
ltad
y honestidad promueven el éxito y la sostenibilidad de todo compromiso.
·&nb=
sp;
Se ha destacado en los
límites del acuerdo de mediación el deber ser del mediador, quien al moment=
o de
conducir a arreglos que están fuera del marco legal o que no son equitativo=
s,
estaría ocasionando perjuicio a los intervinientes y ello podría acarrearle
responsabilidad civil o penal según sea el caso; o incluso ser acusado de
negligente por mala praxis. Conocer los límites del ejercicio de la mediaci=
ón,
promueve un entorno confiable y eficiente.
·&nb=
sp;
El identificar los
límites del acuerdo de mediación permite establecer las áreas que pueden ser
negociadas y las que están fuera de su alcance para lograr acuerdos realist=
as y
ejecutables. Si los acuerdos de mediación se hacen fuera de ellos, pueden l=
legar
a ser considerados nulos como por ejemplo en los casos de falta de capacida=
d de
los participantes, consentimiento viciado o formalidades no cumplidas, lo q=
ue
puede degenerar en mayores disputas.
5.
Conflicto de
intereses
Los autores declaran que no existe conflicto de
intereses en relación con el artículo presentado.
6.
Declaración de
contribución de los autores
Todos autores contribuyeron significativamente en =
la
elaboración del artículo.
7.
Costos de financiamiento
La presente investigación fue financiada en su
totalidad con fondos propios de los autores.
8.
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